Columnas de humo oscurecen los cielos,
los días ya se ensombrecen,
negras formas pueblan los yermos,
ya no hay lugar donde esconderse.
Gritos de espanto suenan a lo lejos,
mientras los hombres se preparan,
es el juicio de todos los tiempos,
que camina implacable hacia sus casas.
¡Ya vienen, ya vienen!,
grita el guardia desde la verja,
a destrucción y podredumbre huelen,
son los muertos que van a la guerra.
Armaduras, lanzas y huesos,
pesadas monturas con jinetes,
a paso firme pero certero,
aterrorizando a las gentes.
Ya se nota en el ambiente,
ya no brilla ninguna estrella,
el eclipse de luna no miente,
son los muertos que van a la guerra.
No perdáis la esperanza,
grita un noble caballero,
mantened firme vuestra espada,
y afrontad con honor vuestro miedo.
Pues sabed que la noche no es eterna,
así como el mayor de los tormentos,
ni aunque los muertos vayan a la guerra,
os impedirán ver la luz en los cielos.
oohh este poema me recuerda a uno de mis sueños O.o
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