Ir al contenido principal

Vengala en noche cerrada

Le damos la espalda al hecho,
de que estamos aquí de paso,
que en más de una ocasión,
dos y dos no suman cuatro.

Todo es bastante simple,
y al mismo tiempo complicado,
son más las dudas que las certezas,
en el mar de lo que ignoramos.

Allí donde un pez oscuro,
baila junto a uno claro,
crean olas de ondas grises,
en esta vida que navegamos.

Pero la mochila vital,
que custodia pequeños milagros,
me muestra chispas de color,
imaginándome a tu lado.

No importa la cantidad de hojas,
que caigan de los calendarios,
tu nombre es de las pocas cosas,
que conmigo siempre llevo guardado.


Comentarios