Ir al contenido principal

De cartas no enviadas

Son tantas las cosas,
que faltaron por decirnos,
tan intenso ese deseo,
de pasar noches contigo.

No sin antes volverme,
de Nicte un buen amigo,
al retrasar el amanecer,
a cada paso en tus sentidos.

Y decirte suavemente,
al asomarme en tus oídos,
como nada importa,
si tú estás conmigo.

Comentarios